El colectivo El Efequén, que vela por la protección del patrimonio histórico de Fuerteventura, ha denunciado este martes el derribo de la Casa de la Partera o de Maximina Santana, en el pueblo de El Cotillo.

El Ayuntamiento de La Oliva ha confirmado que la vivienda antigua, con elementos propios de la arquitectura de la Isla, contaba con una licencia de demolición desde noviembre de 2014.

La Oliva sale así al paso después de que el lunes las redes sociales difundieran imágenes denunciando el derribo de una vivienda antigua en el pueblo de El Cotillo.

El concejal de Urbanismo y Patrimonio Histórico de La Oliva, David Hernández, ha asegurado, en un comunicado que, a pesar de los esfuerzos del actual grupo de gobierno, la demolición no pudo detenerse debido a una licencia municipal otorgada en 2014.

Hernández se ha comprometido a trabajar “diligentemente en la elaboración del catálogo arquitectónico para evitar situaciones similares y preservar nuestro patrimonio e identidad cultural".

Respecto al avance del catálogo patrimonial, el concejal ha informado que se lleva dos años trabajando en él y, si todo sigue según lo planeado, se aprobará inicialmente durante este 2024.

“Este instrumento es crucial y revisaremos minuciosamente los expedientes existentes para garantizar que no haya más situaciones como la ocurrida", ha asegurado.

Estado del inmueble antes del derribo.

Conservación

El Efequén resalta que la citada casa fue construida a mediados del siglo XIX “con los materiales y valores propios de la arquitectura tradicional”. Era una casa de piedra en forma de U con todos sus cuartos en pie y fachada mirando al sur.

“A pesar de su antigüedad a casa no presentaba derrumbes parciales y conservaba todas sus paredes, muros e incluso techumbres hasta el día 5 de febrero de 2024 en el que una pala la ha demolido en su práctica totalidad”, añade el colectivo.

Desde la asociación se resalta que el inmueble aparecía en el catálogo arquitectónico municipal “que lleva en trámites desde el año 2008”, pero que ni se ha aprobado ni publicado. “Por tanto, esta casa no cuenta con la debida protección, aunque cumple todos los requisitos para ello”, agrega el colectivo.

Además, la asociación resalta que cuando se dio la licencia de derribo se sostuvo que la casa estaba en “ruinas” y apunta que se habría procedido a la demolición, una década después de la autorización, cuando se estarían dando pasos para la aprobación del catálogo de Patrimonio.

“Mamotreto”

Lo que ha sucedido con la Casa de la Partera recuerda a lo ocurrido con la conocida como Casa de Sarabia" que pasó de ser una casa de piedra negra de tres cuartos sobre el risco “a una especie de palacete de dos plantas a menos de muy pocos metros del mar”.

“Del mismo modo, se derrumbó la casa de piedra con los permisos pertinentes y se construyó en su lugar un mamotreto que no mantiene la línea de materiales ni forma de la construcción tradicional del pueblo de El Cotillo”, agrega El Efequén.

“Por otro lado”, destaca la asociación, “tenemos justo enfrente de la Casa de la Partera una obra de reciente construcción, que no encaja en el entorno por su morfología y tamaño, que en su momento estuvo en litigio porque se construyó muy cerca de un horno de cal que se esperaba fuera declarado BIC”. “Dicha declaración solo ocurrió después de la construcción de la nueva obra”, critica la entidad.

“Especulación importante”

Desde El Efequén hacen hincapié en que El Cotillo “está siendo víctima de un proceso de especulación importante” y consideran que el reciente derribo “es un claro ejemplo de ello”. Además, resaltan que “el pueblo cuenta con más plazas en viviendas vacacionales que población censada, y que las instituciones tienen el deber de proteger el patrimonio, el paisaje, el bienestar social y la economía local de nuestros pueblos”.